Si necesita más horas de las que ofrece el centro regional, debe explicar por qué. Escriba su programa semanal y llévelo a una reunión de IPP. Incluya todas las actividades de su vida personal y el tiempo que dedica al cuidado de su hijo.
Tenga en cuenta el tiempo que queda. Puede pedir relevo para hacer mandados, actividades con sus otros hijos, ir a la iglesia o tener tiempo libre. Enumere los comportamientos o necesidades médicas de su hijo que requieren toda su atención (su frecuencia y cuánto tiempo implican). Enumere sus propias necesidades.