La parálisis cerebral afecta su control sobre sus propios movimientos, postura o habla. Es causada por problemas en el desarrollo o daño a las partes del cerebro que controlan los movimientos, la postura o el habla. La parálisis cerebral generalmente comienza al nacer o durante los primeros años de vida. Los primeros signos aparecen antes de los 3 años. Los bebés con parálisis cerebral a menudo tardan en alcanzar hitos como aprender a darse la vuelta, sentarse, gatear, sonreír o caminar.
Los síntomas pueden cambiar con el tiempo, pero la parálisis cerebral no es progresiva. Esto significa que no empeora. Si sus síntomas empeoran, el problema puede ser algo más que parálisis cerebral. Los síntomas difieren de una persona a otra. Generalmente incluyen:
- problemas con las tareas motoras finas como escribir o usar tijeras,
- problemas para mantener el equilibrio o caminar, y
- movimientos involuntarios.
Algunas personas con parálisis cerebral pueden tener otras discapacidades, incluidas convulsiones o deterioro mental, pero la parálisis cerebral por sí sola no siempre causa una discapacidad sustancial. Para calificar para los servicios del centro regional debido a su parálisis cerebral, debe ser una discapacidad sustancial para usted. Para obtener más información sobre la parálisis cerebral, haga clic aquí.